La desesperada estrategia de un empresario gastronómico ante las inundaciones en EE.UU.: “Estaremos bien”

Andrew Masterson, copropietario de Captain’s Quarters Riverside Grille en Kentucky, se enfrentó a una situación crítica cuando las inundaciones amenazaron con destruir su negocio. Ante el riesgo de que el agua contaminada de Ohio River ingresara al restaurante y causara daños irreparables, Masterson tomó una decisión poco convencional: llenó el interior del establecimiento con agua dulce.

Inundar el restaurante con agua dulce: el método elegido

Masterson explicó que su local, ubicado cerca de Louisville, quedó con casi un metro de agua limpia en su interior. “El agua dulce mantendrá fuera las inundaciones de hasta un metro y medio o casi dos metros, hasta que la presión sea demasiada”, dijo a CNN.

Antes de inundar el edificio de manera controlada, Masterson y su equipo retiraron los electrodomésticos de cocina y los paneles electrónicos. Luego, llenaron el interior utilizando grifos, fregaderos y una bomba de pozo. El objetivo fue crear una barrera que evitara que el agua contaminada del exterior ingresara y dañara la estructura del local.

“Creo que estaremos bien. Un metro y medio más no será tan devastador como dos metros y medio”, sostuvo Masterson, quien monitoreó todo el proceso mientras el agua subía.

Preparativos especiales en Captain’s Quarters ante la amenaza de tormentas

La estrategia no fue la única medida adoptada. Según WHAS11, Masterson y su equipo evacuaron rápidamente el mobiliario del restaurante ante la amenaza de lluvias torrenciales, vientos fuertes y posibles tornados en la región.

Las mesas y sillas del patio fueron subidas al techo mediante un montacargas para mantenerlas a salvo. Los electrodomésticos y otros bienes se trasladaron a un remolque alejado del río. El restaurante también cuenta con pisos de baldosas, paredes no porosas y muebles de acero inoxidable, características que facilitan la limpieza tras una inundación.

“Hemos pasado por esto suficientes veces como para tener un sistema en marcha. Aprendemos algo nuevo en cada inundación”, dijo Masterson a WHAS11: “Hacemos mejoras constantes para ser más eficientes”.

El riesgo constante de inundaciones en Louisville

La ubicación de Captain’s Quarters, en la confluencia del Ohio River y Harrods Creek, expone al negocio a frecuentes crecidas. Apenas dos meses atrás, el restaurante soportó casi un metro de agua dentro del edificio, una situación que sirvió como experiencia previa.

“Siempre existe la posibilidad de que no llueva tanto como pronostican”, reconoció Masterson en diálogo con WHAS11: “Pero no podemos arriesgarnos. Si no nos preparamos, podríamos perderlo todo”.

Tras el anegamiento del local, el equipo se apresuró a llevar tranquilidad a sus clientes. “Estaremos abiertos de nuevo tan pronto como el agua se retire”, afirmó Masterson. Lejos de alarmarse por la situación, el dueño del restaurante decidió tomarse el incidente con humor. Para demostrarlo, compartió en sus redes sociales fotos de patos de hule flotando dentro del local inundado.

Inundaciones en Kentucky: un desafío para los negocios locales

Las inundaciones no solo afectan a Captain’s Quarters, sino también a numerosos pequeños empresarios de Kentucky. La combinación de lluvias intensas y ríos desbordados representa un desafío creciente en la región.

En Louisville, otros locales ubicados cerca del Ohio River también han debido evacuar bienes y reforzar sus instalaciones. La persistencia de fenómenos meteorológicos extremos plantea nuevas exigencias para quienes dependen del turismo y la gastronomía en zonas ribereñas. Masterson, sin embargo, se muestra optimista: “Mientras sigamos aprendiendo y adaptándonos, nuestro negocio va a sobrevivir”, aseguró.

Andrew Masterson, copropietario de Captain’s Quarters Riverside Grille en Kentucky, se enfrentó a una situación crítica cuando las inundaciones amenazaron con destruir su negocio. Ante el riesgo de que el agua contaminada de Ohio River ingresara al restaurante y causara daños irreparables, Masterson tomó una decisión poco convencional: llenó el interior del establecimiento con agua dulce.

Inundar el restaurante con agua dulce: el método elegido

Masterson explicó que su local, ubicado cerca de Louisville, quedó con casi un metro de agua limpia en su interior. “El agua dulce mantendrá fuera las inundaciones de hasta un metro y medio o casi dos metros, hasta que la presión sea demasiada”, dijo a CNN.

Antes de inundar el edificio de manera controlada, Masterson y su equipo retiraron los electrodomésticos de cocina y los paneles electrónicos. Luego, llenaron el interior utilizando grifos, fregaderos y una bomba de pozo. El objetivo fue crear una barrera que evitara que el agua contaminada del exterior ingresara y dañara la estructura del local.

“Creo que estaremos bien. Un metro y medio más no será tan devastador como dos metros y medio”, sostuvo Masterson, quien monitoreó todo el proceso mientras el agua subía.

Preparativos especiales en Captain’s Quarters ante la amenaza de tormentas

La estrategia no fue la única medida adoptada. Según WHAS11, Masterson y su equipo evacuaron rápidamente el mobiliario del restaurante ante la amenaza de lluvias torrenciales, vientos fuertes y posibles tornados en la región.

Las mesas y sillas del patio fueron subidas al techo mediante un montacargas para mantenerlas a salvo. Los electrodomésticos y otros bienes se trasladaron a un remolque alejado del río. El restaurante también cuenta con pisos de baldosas, paredes no porosas y muebles de acero inoxidable, características que facilitan la limpieza tras una inundación.

“Hemos pasado por esto suficientes veces como para tener un sistema en marcha. Aprendemos algo nuevo en cada inundación”, dijo Masterson a WHAS11: “Hacemos mejoras constantes para ser más eficientes”.

El riesgo constante de inundaciones en Louisville

La ubicación de Captain’s Quarters, en la confluencia del Ohio River y Harrods Creek, expone al negocio a frecuentes crecidas. Apenas dos meses atrás, el restaurante soportó casi un metro de agua dentro del edificio, una situación que sirvió como experiencia previa.

“Siempre existe la posibilidad de que no llueva tanto como pronostican”, reconoció Masterson en diálogo con WHAS11: “Pero no podemos arriesgarnos. Si no nos preparamos, podríamos perderlo todo”.

Tras el anegamiento del local, el equipo se apresuró a llevar tranquilidad a sus clientes. “Estaremos abiertos de nuevo tan pronto como el agua se retire”, afirmó Masterson. Lejos de alarmarse por la situación, el dueño del restaurante decidió tomarse el incidente con humor. Para demostrarlo, compartió en sus redes sociales fotos de patos de hule flotando dentro del local inundado.

Inundaciones en Kentucky: un desafío para los negocios locales

Las inundaciones no solo afectan a Captain’s Quarters, sino también a numerosos pequeños empresarios de Kentucky. La combinación de lluvias intensas y ríos desbordados representa un desafío creciente en la región.

En Louisville, otros locales ubicados cerca del Ohio River también han debido evacuar bienes y reforzar sus instalaciones. La persistencia de fenómenos meteorológicos extremos plantea nuevas exigencias para quienes dependen del turismo y la gastronomía en zonas ribereñas. Masterson, sin embargo, se muestra optimista: “Mientras sigamos aprendiendo y adaptándonos, nuestro negocio va a sobrevivir”, aseguró.

 

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