Amores retro que dejaron huella, entre flechazos, convivencia, peleas e infidelidades

Mientras que Paola Krum y Pablo Rago se enamoraron en un set igual que y Eugenia Tobal y Nicolás Cabré, Celeste Cid y Chano Charpentier dieron riendas sueltas al amor después de una cena con amigos. En tanto, a Jazmín Stuart y a Andy Kusnetzoff el flechazo les llegó durante una entrevista, lo mismo que les ocurrió a Elizabeth Vernaci y Luciano Castro. Los romances pueden surgir en cualquier momento y lugar, y estas cinco historias no hacen más que reflejar esta verdad de Perogrullo. Cinco parejas de figuras muy conocidas, que en su momento llenaron varias tapas de revistas y también dieron mucho material para contar. Hubo felicidad y convivencia, pero en algunos casos el final no fue de la mejor manera y todo terminó muy mal.

De novios a amigos

Andy Kusnetzoff y Jazmín Stuart se conocieron a finales de los 90, cuando ella fue como invitada al programa de radio que conducía él, Perros de la calle. Dicen que fue un flechazo, que coquetearon al aire y que él la invitó a cenar esa misma noche. Ambos de perfil bajo, al principio se escondían hasta que un paparazzi los descubrió y blanquearon la relación. Estuvieron juntos casi cinco años y convivieron en un coqueto departamento de Palermo hasta que se separaron en 2005. Nunca hablaron de su intimidad y no hicieron escándalos. Se tienen cariño y mantienen todavía una buena relación.

De la ficción a la realidad

Pablo Rago y Paola Krum se conocieron en los pasillos de Canal 9 y se enamoraron al mismo ritmo que sus personajes en la novela Inconquistable corazón, en 1994, que contaba una relación prohibida, la de un alumno de 5º año con su profesora. Si bien él era muy popular luego de éxitos como Clave de sol y Amigos son los amigos, este era su primer protagónico, al igual que el de Krum, que estaba dando sus primeros pasos en el medio. No hubo flechazo, todo lo contrario. Dicen que en las primeras escenas había mala onda, que apenas se soportaban y cuando terminaban ni se dirigían la palabra. Sin embargo, eso no duró mucho tiempo y pronto empezaron las miradas furtivas y las risas cómplices. El ambiente laboral se tornó cálido y fue bueno porque las jornadas se extendían por más de 12 horas.

Por ese entonces, Rago estaba en pareja con Sandra Pettovello, actual Ministra de Capital Humano, y Krum también tenía novio y se llamaba Fernando Ciuffo, un cantante lírico con el que compartió escenario en el musical El jorobado de París. Cuando hubo rumores de romance entre los protagonistas de la novela, ellos se encargaron de negarlo e insistían en aclarar que eran solamente compañeros de trabajo. Hasta que, ambos ya separados, se animaron a contar que estaban enamorados. “Los dos estábamos mal por nuestras separaciones y empezamos a compartir cafés en la grabación”, contó el actor alguna vez. La novela se terminó, pero la historia de amor continuó durante dos años hasta que se separaron a fines de 1997, sin hacer lío ni dar tampoco explicaciones públicas. Simplemente, se había terminado el amor.

El novio de mamá

Elizabeth Vernaci y Luciano Castro se conocieron a principios de los 2000 cuando ambos fueron como invitados a La biblia y el calefón, que conducía Jorge Guinzburg. Enseguida pegaron buena onda y empezaron a coquetear al aire, lo que Guinzburg aprovechó. Cuando la relación se hizo pública dio mucho que hablar, por la diferencia de edad: ella le llevaba 13 años. Ellos, ajenos al “qué dirán”, vivieron su romance a pleno. Estuvieron juntos cuatro años y se separaron sin escándalos. Aunque se tenían cariño, no volvieron a verse hasta hace poco tiempo, cuando se reencontraron en un streaming y los dos se emocionaron cuando Vernaci le hizo escuchar al actor un mensaje de audio que le enviaba su hijo Vicente.

Cuando Elizabeth y Luciano fueron pareja, ella ya era mamá de Vicente, que apenas tenía 3 años y tuvo un muy buen vínculo con el actor. “Quiero compartir algunas de las enseñanzas que me dio. Primero, me enseñó a cómo pegar. Quiero decir que yo tenía entre dos y siete años, pero bueno, bienvenido el consejo porque nunca me pegaron… Segundo, me enseñó a cómo tomar soda del pico. Y para alguien que es adicto a la soda, como yo, es lo mejor que le puede pasar. Lo sigo haciendo y lo recomiendo muchísimo. Y, por último, algo que me pasó hace poquito; me desconcentré, miré para abajo y choqué el auto. Eso es algo que yo vi que Luciano hizo. Dicho esto, Lu, te quiero muchísimo y siempre tengo los mejores recuerdos con vos”, decía Vicente en el audio. Estas palabras provocaron una gran emoción, y por supuesto algunas risas, en el actor.

La tercera en discordia

La relación de Eugenia Tobal y Nicolás Cabré terminó con un gran escándalo y en medio de rumores de infidelidad por parte del actor. Se conocieron haciendo la tira Los únicos, en 2011. Cinco meses después se casaron por civil y lo festejaron con una reunión íntima. Al tiempo contaron que estaban embarazados, pero perdieron ese bebé y a la actriz le costó mucho tiempo recuperarse.

Fue un romance intenso que duró un poco más de un año y la separación fue en medio de un gran escándalo alimentado por los fuertes rumores de infidelidad del actor con la China Suárez, que también era compañera de ellos en Los únicos.

Tras la ruptura de esta pareja, se confirmó luego el romance del actor con la China Suárez, una noticia que no hizo más que agregar un nuevo capítulo a la escandalosa separación.

Mala convivencia

Celeste Cid y Chano Charpentier se conocieron en 2013, en casa de amigos en común. Dicen que el flechazo fue mutuo y que esa misma noche se fueron juntos. A los pocos meses decidieron convivir y hasta se hicieron el mismo tatuaje para sellar su amor. Pero la experiencia no fue buena, las peleas eran continuas y al año decidieron separarse. Se decía que las adicciones de ambos fueron el gran problema, pero el músico lo desmintió: “Somos explosivos, en el buen y en el mal sentido. Cuando nos peleábamos ardía Troya y cuando estábamos bien, éramos muy felices”.

Mientras que Paola Krum y Pablo Rago se enamoraron en un set igual que y Eugenia Tobal y Nicolás Cabré, Celeste Cid y Chano Charpentier dieron riendas sueltas al amor después de una cena con amigos. En tanto, a Jazmín Stuart y a Andy Kusnetzoff el flechazo les llegó durante una entrevista, lo mismo que les ocurrió a Elizabeth Vernaci y Luciano Castro. Los romances pueden surgir en cualquier momento y lugar, y estas cinco historias no hacen más que reflejar esta verdad de Perogrullo. Cinco parejas de figuras muy conocidas, que en su momento llenaron varias tapas de revistas y también dieron mucho material para contar. Hubo felicidad y convivencia, pero en algunos casos el final no fue de la mejor manera y todo terminó muy mal.

De novios a amigos

Andy Kusnetzoff y Jazmín Stuart se conocieron a finales de los 90, cuando ella fue como invitada al programa de radio que conducía él, Perros de la calle. Dicen que fue un flechazo, que coquetearon al aire y que él la invitó a cenar esa misma noche. Ambos de perfil bajo, al principio se escondían hasta que un paparazzi los descubrió y blanquearon la relación. Estuvieron juntos casi cinco años y convivieron en un coqueto departamento de Palermo hasta que se separaron en 2005. Nunca hablaron de su intimidad y no hicieron escándalos. Se tienen cariño y mantienen todavía una buena relación.

De la ficción a la realidad

Pablo Rago y Paola Krum se conocieron en los pasillos de Canal 9 y se enamoraron al mismo ritmo que sus personajes en la novela Inconquistable corazón, en 1994, que contaba una relación prohibida, la de un alumno de 5º año con su profesora. Si bien él era muy popular luego de éxitos como Clave de sol y Amigos son los amigos, este era su primer protagónico, al igual que el de Krum, que estaba dando sus primeros pasos en el medio. No hubo flechazo, todo lo contrario. Dicen que en las primeras escenas había mala onda, que apenas se soportaban y cuando terminaban ni se dirigían la palabra. Sin embargo, eso no duró mucho tiempo y pronto empezaron las miradas furtivas y las risas cómplices. El ambiente laboral se tornó cálido y fue bueno porque las jornadas se extendían por más de 12 horas.

Por ese entonces, Rago estaba en pareja con Sandra Pettovello, actual Ministra de Capital Humano, y Krum también tenía novio y se llamaba Fernando Ciuffo, un cantante lírico con el que compartió escenario en el musical El jorobado de París. Cuando hubo rumores de romance entre los protagonistas de la novela, ellos se encargaron de negarlo e insistían en aclarar que eran solamente compañeros de trabajo. Hasta que, ambos ya separados, se animaron a contar que estaban enamorados. “Los dos estábamos mal por nuestras separaciones y empezamos a compartir cafés en la grabación”, contó el actor alguna vez. La novela se terminó, pero la historia de amor continuó durante dos años hasta que se separaron a fines de 1997, sin hacer lío ni dar tampoco explicaciones públicas. Simplemente, se había terminado el amor.

El novio de mamá

Elizabeth Vernaci y Luciano Castro se conocieron a principios de los 2000 cuando ambos fueron como invitados a La biblia y el calefón, que conducía Jorge Guinzburg. Enseguida pegaron buena onda y empezaron a coquetear al aire, lo que Guinzburg aprovechó. Cuando la relación se hizo pública dio mucho que hablar, por la diferencia de edad: ella le llevaba 13 años. Ellos, ajenos al “qué dirán”, vivieron su romance a pleno. Estuvieron juntos cuatro años y se separaron sin escándalos. Aunque se tenían cariño, no volvieron a verse hasta hace poco tiempo, cuando se reencontraron en un streaming y los dos se emocionaron cuando Vernaci le hizo escuchar al actor un mensaje de audio que le enviaba su hijo Vicente.

Cuando Elizabeth y Luciano fueron pareja, ella ya era mamá de Vicente, que apenas tenía 3 años y tuvo un muy buen vínculo con el actor. “Quiero compartir algunas de las enseñanzas que me dio. Primero, me enseñó a cómo pegar. Quiero decir que yo tenía entre dos y siete años, pero bueno, bienvenido el consejo porque nunca me pegaron… Segundo, me enseñó a cómo tomar soda del pico. Y para alguien que es adicto a la soda, como yo, es lo mejor que le puede pasar. Lo sigo haciendo y lo recomiendo muchísimo. Y, por último, algo que me pasó hace poquito; me desconcentré, miré para abajo y choqué el auto. Eso es algo que yo vi que Luciano hizo. Dicho esto, Lu, te quiero muchísimo y siempre tengo los mejores recuerdos con vos”, decía Vicente en el audio. Estas palabras provocaron una gran emoción, y por supuesto algunas risas, en el actor.

La tercera en discordia

La relación de Eugenia Tobal y Nicolás Cabré terminó con un gran escándalo y en medio de rumores de infidelidad por parte del actor. Se conocieron haciendo la tira Los únicos, en 2011. Cinco meses después se casaron por civil y lo festejaron con una reunión íntima. Al tiempo contaron que estaban embarazados, pero perdieron ese bebé y a la actriz le costó mucho tiempo recuperarse.

Fue un romance intenso que duró un poco más de un año y la separación fue en medio de un gran escándalo alimentado por los fuertes rumores de infidelidad del actor con la China Suárez, que también era compañera de ellos en Los únicos.

Tras la ruptura de esta pareja, se confirmó luego el romance del actor con la China Suárez, una noticia que no hizo más que agregar un nuevo capítulo a la escandalosa separación.

Mala convivencia

Celeste Cid y Chano Charpentier se conocieron en 2013, en casa de amigos en común. Dicen que el flechazo fue mutuo y que esa misma noche se fueron juntos. A los pocos meses decidieron convivir y hasta se hicieron el mismo tatuaje para sellar su amor. Pero la experiencia no fue buena, las peleas eran continuas y al año decidieron separarse. Se decía que las adicciones de ambos fueron el gran problema, pero el músico lo desmintió: “Somos explosivos, en el buen y en el mal sentido. Cuando nos peleábamos ardía Troya y cuando estábamos bien, éramos muy felices”.

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *