Este domingo, Salta será escenario de la segunda elección provincial del calendario nacional, en una jornada que compartirá cartel con otras tres provincias: Chaco, Jujuy y San Luis. El gobernador Gustavo Sáenz, un peronista no alineado con el kirchnerismo que mantuvo vínculos estrechos con Sergio Massa, transita su segundo mandato y buscará preservar su gobernabilidad con un ojo puesto en octubre, cuando se reordene el tablero nacional.
En esta contienda, donde el oficialismo provincial y La Libertad Avanza competirán sin matices ni alianzas, se empezará a delinear la base de poder sobre la que luego se negociarán las candidaturas nacionales: senadores, diputados y, eventualmente, quienes aspiren a disputar la gobernación en 2027.
Sin PASO y con Boleta Única Electrónica (BUE), más de un millón de salteños están habilitados para votar y renovar parcialmente su mapa político local. Pero el resultado no se medirá solamente en votos: la verdadera disputa será por las bancas.
La provincia elegirá 30 diputados y 12 senadores provinciales, además de 121 concejales y 232 convencionales municipales. El sistema de votación para senadores responde a un esquema de distrito único por departamento, mientras que los diputados se eligen en forma proporcional a la población de cada sección electoral. Eso significa que no habrá un único ganador, sino múltiples resultados distribuidos en los distintos territorios. El análisis político, entonces, vendrá después: cuando se cuenten los escaños y se defina quién sumó más poder en la Legislatura.
Qué se elige y dónde
En esta elección, 11 departamentos de Salta renovarán diputados provinciales: Anta, Cachi, Cafayate, Chicoana, Iruya, Metán, Orán, Rivadavia, Rosario de la Frontera, San Martín y Capital.
Por su parte, 12 departamentos elegirán senadores: Cachi, Cafayate, Capital, Chicoana, General Güemes, Guachipas, La Caldera, La Poma, Los Andes, Molinos, Rosario de Lerma y San Carlos.
Aunque se trata de una elección departamental con múltiples resultados, todas las miradas estarán puestas en el resultado de la Capital, el distrito con mayor peso electoral y donde se pone en juego la mayor cantidad de bancas en la Cámara de Diputados provincial.
La Libertad Avanza juega sola
A diferencia de lo que sucede en Chaco, La Libertad Avanza se presenta con candidatos propios. La campaña la lidera María Emilia Orozco, diputada nacional y una de las voces libertarias con mayor presencia en redes. Su estrategia es clara: marcar diferencias con el gobernador Gustavo Sáenz, al que vincula con Sergio Massa y al que directamente tilda de “casta”.
En Salta tenés 2 opciones 👉Los mismos de siempre bancados por el gobernador (con toda la estructura política y económica del estado provincial y municipal con tus impuestos) o los candidatos de La Libertad Avanza. Vos elegís. pic.twitter.com/fE2QNCv1rf
— Maria Emilia Orozco💛 (@MariaEmiliaOro) April 30, 2025
El candidato de LLA al Senado por la Capital es Roque Cornejo, poco conocido por el electorado, pero que en la narrativa libertaria aparece de la mano de Javier Milei. El objetivo es que la marca presidencial arrastre. Cornejo es presentado como un soldado del proyecto libertario.
Lo paradójico es que mientras Orozco intenta polarizar con Sáenz, en el Congreso Nacional los diputados que responden al gobernador han sido claves para sostener al oficialismo libertario. Votaron junto al Gobierno en momentos decisivos: fueron esenciales para frenar iniciativas opositoras incómodas y facilitaron la aprobación de leyes centrales, como la Ley Bases. Esa convivencia legislativa contrasta con la disputa local.
La estrategia del oficialismo
El gobernador Sáenz jugará esta elección con una estrategia a medida: armó dos frentes principales: Unidos por Salta y Vamos por Salta. Según el distrito y su electorado, compite con ambos, con alguno de ellos, o con una combinación de los dos.
En la Capital, por caso, eligió confluir los frentes en la Alianza por la Unidad de los Salteños para disputar la banca en el Senado. Su candidato es Bernardo Biella, médico de profesión y actual diputado provincial.
El armado oficialista busca sostener su poder territorial en una Legislatura que se renueva por mitades: 12 de 23 senadores y 30 de 60 diputados dejarán sus bancas este año.
En frente, el panorama opositor es variado. Cambiemos Salta, armado por el Pro, compite por separado del Frente Juntos, que agrupa a la UCR y al Frente Plural. El Partido Justicialista, intervenido a nivel provincial después de que Sáenz rompió con Unión por la Patria en el Congreso y se escindió junto a otros gobernadores, se reorganizó bajo el paraguas del Frente Justicialista Salteño, que reúne a figuras nacionales como el senador Sergio “Oso” Leavy y el diputado Emiliano Estrada, con el aval de los interventores Sergio Berni y María Laura Alonso.
También juegan espacios de izquierda, con tres listas que buscarán conservar o ampliar su histórica representación en la Capital.
La herramienta de votación
Con 1.109.673 salteños habilitados para votar, el distrito de mayor peso es la Capital, que representa más del 41% del padrón con 457.642 electores. El proceso se llevará a cabo con la BUE, un sistema que ya funciona de manera integral en toda la provincia desde 2013.
Será uno de los puntos que, posiblemente, los libertarios cuestionen cuando se conozcan los resultados. Orozco ya lo dijo en medios locales, cuando planteó dudas sobre la “transparencia” del actual sistema de votación. “Ya tenemos pruebas de que pueden hacer fraude. Vamos a empezar dos o tres puntos abajo, pero igual vamos a dar batalla”, lanzó.
Es que Salta pondrá a prueba no solo su ingeniería electoral, sino también el equilibrio de fuerzas que viene marcando la política nacional. Lo que se defina en esta provincia no será solo un asunto local: tendrá ecos directos en las alianzas que se tejan de cara a octubre.
Este domingo, Salta será escenario de la segunda elección provincial del calendario nacional, en una jornada que compartirá cartel con otras tres provincias: Chaco, Jujuy y San Luis. El gobernador Gustavo Sáenz, un peronista no alineado con el kirchnerismo que mantuvo vínculos estrechos con Sergio Massa, transita su segundo mandato y buscará preservar su gobernabilidad con un ojo puesto en octubre, cuando se reordene el tablero nacional.
En esta contienda, donde el oficialismo provincial y La Libertad Avanza competirán sin matices ni alianzas, se empezará a delinear la base de poder sobre la que luego se negociarán las candidaturas nacionales: senadores, diputados y, eventualmente, quienes aspiren a disputar la gobernación en 2027.
Sin PASO y con Boleta Única Electrónica (BUE), más de un millón de salteños están habilitados para votar y renovar parcialmente su mapa político local. Pero el resultado no se medirá solamente en votos: la verdadera disputa será por las bancas.
La provincia elegirá 30 diputados y 12 senadores provinciales, además de 121 concejales y 232 convencionales municipales. El sistema de votación para senadores responde a un esquema de distrito único por departamento, mientras que los diputados se eligen en forma proporcional a la población de cada sección electoral. Eso significa que no habrá un único ganador, sino múltiples resultados distribuidos en los distintos territorios. El análisis político, entonces, vendrá después: cuando se cuenten los escaños y se defina quién sumó más poder en la Legislatura.
Qué se elige y dónde
En esta elección, 11 departamentos de Salta renovarán diputados provinciales: Anta, Cachi, Cafayate, Chicoana, Iruya, Metán, Orán, Rivadavia, Rosario de la Frontera, San Martín y Capital.
Por su parte, 12 departamentos elegirán senadores: Cachi, Cafayate, Capital, Chicoana, General Güemes, Guachipas, La Caldera, La Poma, Los Andes, Molinos, Rosario de Lerma y San Carlos.
Aunque se trata de una elección departamental con múltiples resultados, todas las miradas estarán puestas en el resultado de la Capital, el distrito con mayor peso electoral y donde se pone en juego la mayor cantidad de bancas en la Cámara de Diputados provincial.
La Libertad Avanza juega sola
A diferencia de lo que sucede en Chaco, La Libertad Avanza se presenta con candidatos propios. La campaña la lidera María Emilia Orozco, diputada nacional y una de las voces libertarias con mayor presencia en redes. Su estrategia es clara: marcar diferencias con el gobernador Gustavo Sáenz, al que vincula con Sergio Massa y al que directamente tilda de “casta”.
En Salta tenés 2 opciones 👉Los mismos de siempre bancados por el gobernador (con toda la estructura política y económica del estado provincial y municipal con tus impuestos) o los candidatos de La Libertad Avanza. Vos elegís. pic.twitter.com/fE2QNCv1rf
— Maria Emilia Orozco💛 (@MariaEmiliaOro) April 30, 2025
El candidato de LLA al Senado por la Capital es Roque Cornejo, poco conocido por el electorado, pero que en la narrativa libertaria aparece de la mano de Javier Milei. El objetivo es que la marca presidencial arrastre. Cornejo es presentado como un soldado del proyecto libertario.
Lo paradójico es que mientras Orozco intenta polarizar con Sáenz, en el Congreso Nacional los diputados que responden al gobernador han sido claves para sostener al oficialismo libertario. Votaron junto al Gobierno en momentos decisivos: fueron esenciales para frenar iniciativas opositoras incómodas y facilitaron la aprobación de leyes centrales, como la Ley Bases. Esa convivencia legislativa contrasta con la disputa local.
La estrategia del oficialismo
El gobernador Sáenz jugará esta elección con una estrategia a medida: armó dos frentes principales: Unidos por Salta y Vamos por Salta. Según el distrito y su electorado, compite con ambos, con alguno de ellos, o con una combinación de los dos.
En la Capital, por caso, eligió confluir los frentes en la Alianza por la Unidad de los Salteños para disputar la banca en el Senado. Su candidato es Bernardo Biella, médico de profesión y actual diputado provincial.
El armado oficialista busca sostener su poder territorial en una Legislatura que se renueva por mitades: 12 de 23 senadores y 30 de 60 diputados dejarán sus bancas este año.
En frente, el panorama opositor es variado. Cambiemos Salta, armado por el Pro, compite por separado del Frente Juntos, que agrupa a la UCR y al Frente Plural. El Partido Justicialista, intervenido a nivel provincial después de que Sáenz rompió con Unión por la Patria en el Congreso y se escindió junto a otros gobernadores, se reorganizó bajo el paraguas del Frente Justicialista Salteño, que reúne a figuras nacionales como el senador Sergio “Oso” Leavy y el diputado Emiliano Estrada, con el aval de los interventores Sergio Berni y María Laura Alonso.
También juegan espacios de izquierda, con tres listas que buscarán conservar o ampliar su histórica representación en la Capital.
La herramienta de votación
Con 1.109.673 salteños habilitados para votar, el distrito de mayor peso es la Capital, que representa más del 41% del padrón con 457.642 electores. El proceso se llevará a cabo con la BUE, un sistema que ya funciona de manera integral en toda la provincia desde 2013.
Será uno de los puntos que, posiblemente, los libertarios cuestionen cuando se conozcan los resultados. Orozco ya lo dijo en medios locales, cuando planteó dudas sobre la “transparencia” del actual sistema de votación. “Ya tenemos pruebas de que pueden hacer fraude. Vamos a empezar dos o tres puntos abajo, pero igual vamos a dar batalla”, lanzó.
Es que Salta pondrá a prueba no solo su ingeniería electoral, sino también el equilibrio de fuerzas que viene marcando la política nacional. Lo que se defina en esta provincia no será solo un asunto local: tendrá ecos directos en las alianzas que se tejan de cara a octubre.