Hace algunas semanas, Disney+ estrenó Good American Family, la serie de ocho capítulos que relata la historia de Natalia Grace, una nena ucraniana de siete años que es adoptada por una pareja de Estados Unidos. Basada en un hecho real, los que la vieron quisieron sumergirse no solo en los detalles de la producción escrita por Katie Robbins, sino también en la vida de Imogen Faith Reid, la actriz de 27 años que se puso en la piel de la protagonista.
En una entrevista con el medio Pop Sugar, la intérprete de Natalia comentó que sufre de enanismo -mide 1.40, metros- al igual que su personaje, pero que tiene una condición médica distinta conocida como síndrome Russell-Silver. “Este tipo de enanismo me hace estar desproporcionada. Mi familia lo explica como si me pareciera a Pulgarcita, ya que ella es simplemente un personaje diminuto”, comenzó.
En ese sentido, comentó que la gente la trata como una niña, algo que es verdaderamente molesto para ella. “Creo que esto se debe a la falta de información sobre el enanismo y a que existen diferentes tipos que la gente simplemente desconoce. Lamentablemente, como suele suceder, la falta de educación y comprensión puede llevar a la discriminación y la crueldad, algo con lo que Natalia tuvo que lidiar toda su vida”, señaló.
Y agregó: “Me miran mucho y se burlan de mí cuando camino por la calle. A veces se dan cuenta de que soy una persona pequeña y aun así se burlan de mi apariencia. Dependiendo de mi estado de ánimo ese día, puede afectarme mucho o no importarme”.
Reid espera que su protagónico provoque un cambio en la sociedad y que puedan llevarse a cabo programas de concientización. “Soy una persona muy abierta y me encantaría ayudarte a comprender. Quizás salgas de aquí con una perspectiva diferente de la vida”, concluyó.
Cabe destacar que el caso en el que se inspiró la serie conmocionó a los Estados Unidos. A tres años de que Kristine y Michael Barnett adoptaron a Grace, decidieron devolverla, ya que la pareja acusó a su hija adoptiva de ser una sociópata de 22 años que se escondía en el cuerpo de una niña y sintieron que sus vidas corrían peligro.
“Le estaba dando un baño y me di cuenta de que tenía vello púbico. Me quedé en shock. Me habían dicho que tenía seis años y era muy evidente que no tenía esa edad”, relató la mujer en una entrevista con DailyMailTV.
Y explicó: “Los medios de comunicación me están tachando de abusadora infantil, pero no hay ningún niño aquí. Natalia era una mujer. Tenía la regla. Dientes de adulto. Nunca creció ni una pulgada, algo que puede ocurrir incluso con niños con enanismo. Todos los doctores confirmaron que padecía enfermedades psicológicas graves que solo se diagnostican en adultos”.
En 2012, la Corte Superior del Condado de Marion, en Indianápolis, concluyó que Natalia había nacido en 1989 y no en 2003 como se creyó inicialmente. Un año más tarde, la pareja se mudó a Canadá con sus hijos biológicos y dejó a la hija adoptiva en un departamento de Lafayette. En 2014, la policía irrumpió en la vivienda debido a la falta de pago del inquilino y se encontró con Grace sola, quien les aseguró que tenía nueve años y que sus padres adoptivos la habían abandonado.
En agosto de 2023, y gracias a una prueba de ADN, se llegó a la conclusión de que Natalia tenía, en ese momento, 22 años. Por lo tanto, cuando sus padres adoptivos la abandonaron solamente tenía 11 años.
Hace algunas semanas, Disney+ estrenó Good American Family, la serie de ocho capítulos que relata la historia de Natalia Grace, una nena ucraniana de siete años que es adoptada por una pareja de Estados Unidos. Basada en un hecho real, los que la vieron quisieron sumergirse no solo en los detalles de la producción escrita por Katie Robbins, sino también en la vida de Imogen Faith Reid, la actriz de 27 años que se puso en la piel de la protagonista.
En una entrevista con el medio Pop Sugar, la intérprete de Natalia comentó que sufre de enanismo -mide 1.40, metros- al igual que su personaje, pero que tiene una condición médica distinta conocida como síndrome Russell-Silver. “Este tipo de enanismo me hace estar desproporcionada. Mi familia lo explica como si me pareciera a Pulgarcita, ya que ella es simplemente un personaje diminuto”, comenzó.
En ese sentido, comentó que la gente la trata como una niña, algo que es verdaderamente molesto para ella. “Creo que esto se debe a la falta de información sobre el enanismo y a que existen diferentes tipos que la gente simplemente desconoce. Lamentablemente, como suele suceder, la falta de educación y comprensión puede llevar a la discriminación y la crueldad, algo con lo que Natalia tuvo que lidiar toda su vida”, señaló.
Y agregó: “Me miran mucho y se burlan de mí cuando camino por la calle. A veces se dan cuenta de que soy una persona pequeña y aun así se burlan de mi apariencia. Dependiendo de mi estado de ánimo ese día, puede afectarme mucho o no importarme”.
Reid espera que su protagónico provoque un cambio en la sociedad y que puedan llevarse a cabo programas de concientización. “Soy una persona muy abierta y me encantaría ayudarte a comprender. Quizás salgas de aquí con una perspectiva diferente de la vida”, concluyó.
Cabe destacar que el caso en el que se inspiró la serie conmocionó a los Estados Unidos. A tres años de que Kristine y Michael Barnett adoptaron a Grace, decidieron devolverla, ya que la pareja acusó a su hija adoptiva de ser una sociópata de 22 años que se escondía en el cuerpo de una niña y sintieron que sus vidas corrían peligro.
“Le estaba dando un baño y me di cuenta de que tenía vello púbico. Me quedé en shock. Me habían dicho que tenía seis años y era muy evidente que no tenía esa edad”, relató la mujer en una entrevista con DailyMailTV.
Y explicó: “Los medios de comunicación me están tachando de abusadora infantil, pero no hay ningún niño aquí. Natalia era una mujer. Tenía la regla. Dientes de adulto. Nunca creció ni una pulgada, algo que puede ocurrir incluso con niños con enanismo. Todos los doctores confirmaron que padecía enfermedades psicológicas graves que solo se diagnostican en adultos”.
En 2012, la Corte Superior del Condado de Marion, en Indianápolis, concluyó que Natalia había nacido en 1989 y no en 2003 como se creyó inicialmente. Un año más tarde, la pareja se mudó a Canadá con sus hijos biológicos y dejó a la hija adoptiva en un departamento de Lafayette. En 2014, la policía irrumpió en la vivienda debido a la falta de pago del inquilino y se encontró con Grace sola, quien les aseguró que tenía nueve años y que sus padres adoptivos la habían abandonado.
En agosto de 2023, y gracias a una prueba de ADN, se llegó a la conclusión de que Natalia tenía, en ese momento, 22 años. Por lo tanto, cuando sus padres adoptivos la abandonaron solamente tenía 11 años.