El Día de San Juan de la Cruz se conmemora el 14 de diciembre por la Iglesia Católica. Se trata del patrono de los poetas en español, los contemplativos, místicos y la ciudad de La Carolina, en España. Es conocido también por sus escritos y por ser el reformador de la Orden de Nuestra Señora del Monte Carmelo y cofundador de la Orden de los Carmelitas Descalzos con Santa Teresa de Jesús.
La historia de San Juan de la Cruz
Juan de Yepes Álvarez nació el 24 de junio de 1542 en Fontiveros, provincia de Ávila, España. Su familia era de ascendencia judía conversa al cristianismo, por lo que heredó su interés por la fe. Sin embargo, el clan había sido desheredado por sus ancestros, por lo que afrontaron una falta de recursos. Es por ello que Juan asistió al Colegio de Doctrinos, una institución ubicada en Medina del Campo, destinada a asistir niños abandonados, bajo la doctrina cristiana. De esta manera, comenzó a instruirse en la religión y sirvió como monaguillo y sacristán en uno de los templos de la ciudad.
En 1551, ingresó al colegio de los Jesuitas y trabajó en el Hospital de Nuestra Señora de la Concepción, lo que le permitió aprender latín y conocer autores clásicos. Doce años más tarde, formó parte del Convento de los Padres Carmelitas, por lo que adoptó el nombre de fray Juan de San Matías. Años más tarde, llevó a cabo el noviciado en el Convento de Santa Ana y se mudó a Salamanca para estudiar en el Colegio de San Andrés de los Cármenes. Allí conoció a Santa Teresa de Jesús, quien lo incentivó a unirse a su proyecto de “reforma carmelita”, que proponía entre muchas cosas una nueva denominación: “descalzos”. Sin embargo, esto le significó una gran disputa con gran parte de este movimiento original.
En 1568, abandona Salamanca junto a Santa Teresa y emprenden viaje a Valladolid, donde fundaron, el 28 de noviembre de ese año, el convento de la rama masculina del Carmelo Descalzo en Duruelo. En esa jornada, decide cambiar su nombre a fray Juan de la Cruz. Tres años más tarde, es nombrado rector del Colegio de Carmelitas Descalzos de San Cirilo.
En el año 1577, es apresado y trasladado a Toledo, donde permanece por ocho meses en los cuales sufrió maltratos. Sin embargo, San Juan aprovechó su estadía para escribir una de sus obras más importantes: el Cántico espiritual, un poema lírico que habla sobre la relación entre el alma y Dios. Otros de sus trabajos fueron “Noche oscura del alma”, “Subida del Monte Carmelo” y “Llama de amor viva”.
Luego de ser liberado, continúa sus viajes por diferentes zonas de España y Portugal. Su último destino fue Úbeda, donde falleció el 14 de diciembre de 1591. En 1756, fue canonizado por Benedicto XIII y nombrado en 1952, patrono de los poetas de lengua española.
Como ocurre con muchos santos del catolicismo, Juan de la Cruz cuenta con su propia Novena, la cual comienza cada 5 de diciembre y concluye el 13 de este mes.
Oración para rezarle a San Juan de la Cruz
Según la Agencia Católica de Informaciones – ACI Prensa, la siguiente oración sirve para rezarle a San Juan de la Cruz:
Vuestro emblema fue siempre padecer y ser despreciado. ¡Oh, si pudiese yo al menos resignarme en mis tribulaciones, ya que no soy tan generoso como tú en el padecer y ser despreciado! A ti, pues, que en tantos sufrimientos fuisteis siempre paciente, resignado y gozoso, a ti me encomiendo para que me enseñéis a resignarme en mis muchas penas. Tampoco me faltan fuertes pesares y pesadas cruces, y muy a menudo cansado y desalentado me quedo…, me abato…, y caigo. Ten compasión de mí, y ayúdame a llevar con resignación y gozo mis cruces, con la mirada siempre vuelta al cielo. Os tomo por protector mío, por mi maestro y mi guía aquí en la tierra, para ser vuestro compañero en la patria del Paraíso.
Amén.
El Día de San Juan de la Cruz se conmemora el 14 de diciembre por la Iglesia Católica. Se trata del patrono de los poetas en español, los contemplativos, místicos y la ciudad de La Carolina, en España. Es conocido también por sus escritos y por ser el reformador de la Orden de Nuestra Señora del Monte Carmelo y cofundador de la Orden de los Carmelitas Descalzos con Santa Teresa de Jesús.
La historia de San Juan de la Cruz
Juan de Yepes Álvarez nació el 24 de junio de 1542 en Fontiveros, provincia de Ávila, España. Su familia era de ascendencia judía conversa al cristianismo, por lo que heredó su interés por la fe. Sin embargo, el clan había sido desheredado por sus ancestros, por lo que afrontaron una falta de recursos. Es por ello que Juan asistió al Colegio de Doctrinos, una institución ubicada en Medina del Campo, destinada a asistir niños abandonados, bajo la doctrina cristiana. De esta manera, comenzó a instruirse en la religión y sirvió como monaguillo y sacristán en uno de los templos de la ciudad.
En 1551, ingresó al colegio de los Jesuitas y trabajó en el Hospital de Nuestra Señora de la Concepción, lo que le permitió aprender latín y conocer autores clásicos. Doce años más tarde, formó parte del Convento de los Padres Carmelitas, por lo que adoptó el nombre de fray Juan de San Matías. Años más tarde, llevó a cabo el noviciado en el Convento de Santa Ana y se mudó a Salamanca para estudiar en el Colegio de San Andrés de los Cármenes. Allí conoció a Santa Teresa de Jesús, quien lo incentivó a unirse a su proyecto de “reforma carmelita”, que proponía entre muchas cosas una nueva denominación: “descalzos”. Sin embargo, esto le significó una gran disputa con gran parte de este movimiento original.
En 1568, abandona Salamanca junto a Santa Teresa y emprenden viaje a Valladolid, donde fundaron, el 28 de noviembre de ese año, el convento de la rama masculina del Carmelo Descalzo en Duruelo. En esa jornada, decide cambiar su nombre a fray Juan de la Cruz. Tres años más tarde, es nombrado rector del Colegio de Carmelitas Descalzos de San Cirilo.
En el año 1577, es apresado y trasladado a Toledo, donde permanece por ocho meses en los cuales sufrió maltratos. Sin embargo, San Juan aprovechó su estadía para escribir una de sus obras más importantes: el Cántico espiritual, un poema lírico que habla sobre la relación entre el alma y Dios. Otros de sus trabajos fueron “Noche oscura del alma”, “Subida del Monte Carmelo” y “Llama de amor viva”.
Luego de ser liberado, continúa sus viajes por diferentes zonas de España y Portugal. Su último destino fue Úbeda, donde falleció el 14 de diciembre de 1591. En 1756, fue canonizado por Benedicto XIII y nombrado en 1952, patrono de los poetas de lengua española.
Como ocurre con muchos santos del catolicismo, Juan de la Cruz cuenta con su propia Novena, la cual comienza cada 5 de diciembre y concluye el 13 de este mes.
Oración para rezarle a San Juan de la Cruz
Según la Agencia Católica de Informaciones – ACI Prensa, la siguiente oración sirve para rezarle a San Juan de la Cruz:
Vuestro emblema fue siempre padecer y ser despreciado. ¡Oh, si pudiese yo al menos resignarme en mis tribulaciones, ya que no soy tan generoso como tú en el padecer y ser despreciado! A ti, pues, que en tantos sufrimientos fuisteis siempre paciente, resignado y gozoso, a ti me encomiendo para que me enseñéis a resignarme en mis muchas penas. Tampoco me faltan fuertes pesares y pesadas cruces, y muy a menudo cansado y desalentado me quedo…, me abato…, y caigo. Ten compasión de mí, y ayúdame a llevar con resignación y gozo mis cruces, con la mirada siempre vuelta al cielo. Os tomo por protector mío, por mi maestro y mi guía aquí en la tierra, para ser vuestro compañero en la patria del Paraíso.
Amén.