La localidad neuquina de Colonia Rural Nueva Esperanza amaneció sacudida por una tragedia: un niño de cinco años murió luego de que sus padres no pudieran rescatarlo en medio del incendio de su casa, ubicada en la intersección de las calles Girasol y El Lino.

El incidente ocurrió este miércoles por la noche, cerca de las 22.30. Los Bomberos fueron alertados del fuego en una de las residencias y al acercarse comprobaron que los padres y otros dos menores -hermanos de la víctima- habían logrado salir rápidamente ante el avance de las llamas, pero cuando trataron de volver a rescatar al menor que faltaba las habitaciones ya estaban tomadas.

El niño estaba durmiendo cuando se desató el incendio -aparentemente originado por una falla eléctrica en una estufa- y no pudo salir de la casa por sus propios medios.

Según informó el diario local LM Neuquén, la familia no llegó a retirar a tiempo al menor debido a la rapidez con la que se desató el fuego en la estufa eléctrica. El coordinador operativo Zona Norte de la Dirección de Seguridad Neuquén, comisario inspector Walter Troncoso, aseguró que la vivienda era una “construcción precaria” de material, ubicada en una zona en la que las conexiones eléctricas son “habitualmente clandestinas”. “Al parecer fue por una falla de una estufa que utilizaban para calentarse”, informó, aunque aclaró que las causas se confirmarán una vez que terminen las pericias correspondientes.

Y explicó: “La vivienda quedó con humo, pero no se quemaron todas las cosas. Los ocupantes pudieron salir por sus propios medios, se retiraron casi todos y cuando quisieron ingresar a retirar al niño no pudieron porque se propagaron las llamas”.

El incendio en un hogar de tránsito

Otro incendio tuvo lugar en las últimas horas en las instalaciones del hogar de tránsito La Casita del Milagro, de la Fundación Juguemos y Caminemos Juntos, ubicado en la localidad bonaerense de Pilar. El centro quedó parcialmente destruido luego de que un intento de robo provocara un fuerte incendio.

El hecho ocurrió el martes por la madrugada, cuando comenzaron las primeras llamas en la sala de estudios del hogar en donde dormían 20 niños y seis cuidadoras. “El fuego se expandió rápido porque era un lugar donde había papeles y los pañales de los chicos. Se prendió el techo y el incendio llegó a la sala de juegos, pero no alcanzó el living del hogar. Cuando llegaron los bomberos determinaron que había sido intencional”, explicó Celeste Piñeiro, responsable de comunicación de la Fundación Juguemos y Caminemos Juntos.

Del total de los menores, 14 tuvieron que ser hospitalizados por intoxicación por monóxido de carbono.

El fuego comenzó después de un robo protagonizado por un joven de 21 años que fue detenido por la Policía Bonaerense, identificado por fuentes policiales y judiciales como Máximo Antonelli, de 21 años. El joven -que tenía antecedentes por haber estado preso por robar bombas de agua en casas de Pilar- fue captado por las cámaras de seguridad de la zona ingresando en el lugar y saliendo minutos después mientras cargaba una bolsa con lo que se había llevado.

La filmación de la Municipalidad de Pilar fue clave para poder identificar al sospechoso, detenido por detectives de la Subdelegación Departamental de Investigaciones (SubDDI). “Se hizo un allanamiento en el domicilio del sospechoso y se secuestraron frascos de plasticola que la gente del hogar reconoció como suyos”, dijeron fuentes judiciales.

Los niños hospitalizados, después de estar en observación, fueron dados de alta y derivados a un hogar que la fundación tiene en Escobar.

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La localidad neuquina de Colonia Rural Nueva Esperanza amaneció sacudida por una tragedia: un niño de cinco años murió luego de que sus padres no pudieran rescatarlo en medio del incendio de su casa, ubicada en la intersección de las calles Girasol y El Lino.

El incidente ocurrió este miércoles por la noche, cerca de las 22.30. Los Bomberos fueron alertados del fuego en una de las residencias y al acercarse comprobaron que los padres y otros dos menores -hermanos de la víctima- habían logrado salir rápidamente ante el avance de las llamas, pero cuando trataron de volver a rescatar al menor que faltaba las habitaciones ya estaban tomadas.

El niño estaba durmiendo cuando se desató el incendio -aparentemente originado por una falla eléctrica en una estufa- y no pudo salir de la casa por sus propios medios.

Según informó el diario local LM Neuquén, la familia no llegó a retirar a tiempo al menor debido a la rapidez con la que se desató el fuego en la estufa eléctrica. El coordinador operativo Zona Norte de la Dirección de Seguridad Neuquén, comisario inspector Walter Troncoso, aseguró que la vivienda era una “construcción precaria” de material, ubicada en una zona en la que las conexiones eléctricas son “habitualmente clandestinas”. “Al parecer fue por una falla de una estufa que utilizaban para calentarse”, informó, aunque aclaró que las causas se confirmarán una vez que terminen las pericias correspondientes.

Y explicó: “La vivienda quedó con humo, pero no se quemaron todas las cosas. Los ocupantes pudieron salir por sus propios medios, se retiraron casi todos y cuando quisieron ingresar a retirar al niño no pudieron porque se propagaron las llamas”.

El incendio en un hogar de tránsito

Otro incendio tuvo lugar en las últimas horas en las instalaciones del hogar de tránsito La Casita del Milagro, de la Fundación Juguemos y Caminemos Juntos, ubicado en la localidad bonaerense de Pilar. El centro quedó parcialmente destruido luego de que un intento de robo provocara un fuerte incendio.

El hecho ocurrió el martes por la madrugada, cuando comenzaron las primeras llamas en la sala de estudios del hogar en donde dormían 20 niños y seis cuidadoras. “El fuego se expandió rápido porque era un lugar donde había papeles y los pañales de los chicos. Se prendió el techo y el incendio llegó a la sala de juegos, pero no alcanzó el living del hogar. Cuando llegaron los bomberos determinaron que había sido intencional”, explicó Celeste Piñeiro, responsable de comunicación de la Fundación Juguemos y Caminemos Juntos.

Del total de los menores, 14 tuvieron que ser hospitalizados por intoxicación por monóxido de carbono.

El fuego comenzó después de un robo protagonizado por un joven de 21 años que fue detenido por la Policía Bonaerense, identificado por fuentes policiales y judiciales como Máximo Antonelli, de 21 años. El joven -que tenía antecedentes por haber estado preso por robar bombas de agua en casas de Pilar- fue captado por las cámaras de seguridad de la zona ingresando en el lugar y saliendo minutos después mientras cargaba una bolsa con lo que se había llevado.

La filmación de la Municipalidad de Pilar fue clave para poder identificar al sospechoso, detenido por detectives de la Subdelegación Departamental de Investigaciones (SubDDI). “Se hizo un allanamiento en el domicilio del sospechoso y se secuestraron frascos de plasticola que la gente del hogar reconoció como suyos”, dijeron fuentes judiciales.

Los niños hospitalizados, después de estar en observación, fueron dados de alta y derivados a un hogar que la fundación tiene en Escobar.