Argentina recibirá la próxima semana un millón de dosis de Sinopharm procedentes de Beijing en tres vuelos que arribarán a Ezeiza el 25, 26 y 28 de abril y, de esa manera, habrán llegado al país 9.932.600 vacunas contra el coronavirus.
Según informaron fuentes gubernamentales, esos fármacos que llegarán en dos aeronaves de Aerolíneas Argentinas y en una de Lufthansa, se aplicarán a personas que ya recibieron la primera de las dosis de la vacuna china.
La “Operación Beijing”, como denominan en los pasillos de la Casa Rosada a este nuevo capítulo de las vacunas, traerá al país el tercer millón de los cuatro que Argentina compró al laboratorio del Instituto de Productos Biológicos con sede en la capital del país asiático.
En esta ocasión, la logística se realizará con dos vuelos de Aerolíneas Argentinas que partirán 23 y 24 y llegarán a Ezeiza 25 y 26; mientras que el resto arribará en un avión de Lufthansa que sale el domingo desde la capital asiática y tocará suelo nacional el próximo 28 de abril.
La operación fue confirmada a través de la cuenta de Twitter por el presidente de la línea de bandera, Pablo Ceriani, quien sostuvo, además, que desde la compañía están “dando una respuesta rápida a cada necesidad logística del país, cumpliendo una tarea fundamental para que más argentinos y argentinas puedan vacunarse”.
El directivo detalló que la vacuna llegará “en los vuelos de la aerolínea de bandera AR1061 y AR1051 se traerán 384 mil y 371.200 dosis, mientras que en el de la empresa alemana se transportarán 244.800”.
Logística
A diferencia de lo que sucedió el 1 de abril, cuando llegó el segundo millón de Sinopharm en un solo vuelo, en esta ocasión se necesita de tres viajes por una cuestión de embalaje.
“Antes, en cada cajita llegaban tres viales con una dosis. Esta vez, el fabricante pone un vial por caja, lo que triplica el volumen a transportar”, explicó Ceriani en la red social.
En el caso de las Sinopharm se agrega una complejidad adicional: el fabricante solo avala su traslado en un embalaje térmico llamado “envirotainer” que se caracteriza por ser “activo” y que pueden trasladarse únicamente en la bodega de los aviones y no en la cabina, como sí sucede con las Spunik-V.
“El gobierno nacional busca siempre la opción más barata y eficiente”, señalaron especialistas involucrados en logística y comentaron que, en este caso, hasta se averiguó por la contratación de un “carguero” que pudiera hacer todo en un solo vuelo, una idea que fue finalmente desestimada ya que podría concretarse casi 10 días más tarde de las fechas ahora anunciadas.
Nuevos envíos
Desde la Casa Rosada insisten en la política de no arriesgar información sobre la llegada de próximas remesas de vacunas hasta que la operación de transporte esté confirmada en todas sus fases, desde que el fabricante anuncia que cuenta con stock preparado hasta “el ok” de la logística de los vuelos.
Sin embargo, existen esperanzas de que el millón restante de Sinopharm y nuevos envíos desde Moscú se concreten antes de fin de mes.
Segunda dosis
Respecto de la administración de las vacunas, desde el Ministerio de Salud se informó “que la totalidad de las dos millones de dosis de vacuna del laboratorio Sinopharm programadas para ingresar al país en las próximas semanas, estarán destinadas a completar los esquemas de vacunación ya iniciados”.
Las primeras dosis que llegaron desde China fueron destinadas originalmente a personal de salud y educativo ya que, a principios de marzo, no se contaba con la autorización para ser aplicada a mayores de 60.
Esa situación se modificó el 25 del mes pasado luego que la Administración Nacional de Medicamentos y Tecnología Médica (Anmat) recomendara la inoculación con Sinopharm en adultos mayores.
La decisión de aplicar las vacunas que se recibirán como segundas dosis ya fue comunicada y acordada en el marco de la reunión de la Comisión Nacional de Inmunizaciones realizada el martes 20 de abril y del Consejo Federal de Salud de este miércoles.
La medida, aclararon, responde a que con los nuevos ingresos se dan por cumplidos los contratos celebrados y vigentes a la fecha con el laboratorio productor, “además que la gestión de nuevos contratos y cronogramas de entrega posibles no tiene fecha definida”.
Así, el diferimiento de segundas dosis en al menos tres meses, “continúa vigente para el resto de las vacunas y, en el caso de este insumo en particular se dará por cumplido con el ingreso de estos dos millones de dosis en esta etapa”.